Debutando con mi primita

La historia que les voy a contar es verídica, (aunque para mantener el anonimato de los protagonistas los nombres están cambiados).

Todo empezó una tarde a fines de enero del 2006, cuando estando demasiado al pedo en mi casa decidí a mandarle un mensaje de texto desde mi celular a Romina, una prima hermana que vive en la ciudad de Córdoba.

En realidad hace tiempo que me quería comunicar con ella, debido a que semanas atrás había recibido un mail suyo con un link a una página de esas en las que uno publica una foto y quienes ingresan al sitio pueden votarlas. Sinceramente no sé que anduvo haciendo esa chica, porque con sus 15 tiernos añitos tenía una de las colas más lindas que haya visto!!! Esa imagen me dejo bastante “shockeado” y desde entonces no había podido sacarla de mi cabeza...




Volviendo al relato, como les había dicho, le mande un mensaje a mi prima diciéndole que esa noche a las 21 hs me iba a conectar al msn y que me gustaría mucho que ella también se conectara así chateabamos un poco para ponernos al día. Esa noche fui al ciber un poco antes del horario previsto para arreglar un par de cosas y a las 9 en punto ella se conecto.



Empezamos hablando de lo de siempre: le pregunte como había estado, que hacía, como andaban mi tía y su hermano... las típicas preguntas como para ir rompiendo un poco el hielo. Hasta que en un momento me arriesgue e hice un comentario sobre lo hermosa que estaba en la foto y la suerte que tenía el novio por tenerla a su lado. Ella me agradeció el elogio y no se enojo, al contrario me pregunto si se lo estaba diciendo en serio. Yo le conteste que si, que desde que había visto la foto no podía sacármela de la cabeza y que no podía creer lo linda que se había puesto en los dos años que había pasado sin verla. En ese momento ella prefirió cambiar de tema, y como yo pensé que se me había ido un poco la mano con los comentarios que hice preferí no volver a hablar más del asunto. La charla terminó bien, y ella se despidió agradeciéndome haberla contactado y haciéndome el acuerdo de que el 31 era su cumple.



Esa noche, horas más tarde cuando por fin estaba por quedarme dormido recibí un mensaje de ella, en el que me preguntaba si realmente había sido sincero en lo que le había dicho. A mi me llamo bastante la atención su pregunta, pero le conteste que si, que eso era lo que yo pensaba de ella y que era una lástima que fuéramos primos... A lo que para mi sorpresa ella asintió, y me dijo que había estado mirando las fotos de mi espacio (que es algo así como una página web en las que tengo datos y fotos mías) y que yo también estaba muy lindo. A partir de ese instante nuestras comunicaciones (a través de mensajes o mediante internet) se multiplicaron, al punto de gastarme más de $30 en una semana solamente en mensajes de texto. Nos contamos de todo, desde nuestras fantasías más íntimas hasta nuestras experiencias sexuales. Debo aclarar que en ese punto yo me encontraba bastante mal parado porque a pesar de mis 21 años y pico jamás había tenido sexo. Eso a ella la sorprendió bastante ya que su “debut” fue a temprana edad (a solo un mes de su cumpleaños número 14).



Aprovechando la cercanía de su cumpleaños le comenté que tenía muchas ganas de verla y que me encantaría que nos pudiéramos conocer más. A ella le encantó la idea y me dijo que si yo podía ir a Córdoba ella hablaba con la madre para que me quede en su casa. Yo estaba preparando una materia de la facultad para rendir a fines de febrero, pero ante semejante oferta no pude decir que no. Ordené las cosas en mi trabajo, arregle un par de asuntos pendientes y el viernes a la madrugada salí rumbo a lo que prometía ser un fin de semana inolvidable...



Y no estaba equivocado. A eso de las 8 de la mañana llegué a Córdoba, y me fui caminando hasta su casa ya que queda a muy pocas cuadras de la terminal de ómnibus. Me atendió mi tía, me preguntó como había pasado el viaje y me dijo que acomode mis cosas mientras ella me preparaba el desayuno. Al dirigirme hacia la pieza de mi primo (mi lugar de permanencia durante los días que pasaría allí) pasé por el dormitorio de mi primita. Ahí estaba ella, durmiendo en ropa interior con el ventilador prendido y sin percatarse de que yo la miraba desde la puerta. Aquella imagen aún perdura en mi cabeza, no recuerdo cuanto tiempo me quede observándola, hasta que mi tía me llamó para desayunar.



A eso de las 10 de la mañana ella apareció por la cocina. Traía puesto un shortcito azul y una musculosa blanca. Me saludo, me pregunto como había pasado el viaje y si disculpó por no haber ido a esperarme a la terminal; pero se había quedado hasta tarde con su novio la noche anterior. No se si eso lo dijo a propósito o no se dió cuenta de lo que estaba contándome, pero seguro notó la reacción que su disculpa produjo en mi, porque enseguida cambió de tema. Yo estaba esperando que mi tía saliera de la cocina así me podía quedar a solas con mi primita. Lamentablemente eso no ocurrió y la primera en irse fue mi primita que subió a buscar algo en su pieza. En seguida yo me excuse diciendo que tenía que terminar de ordenar mis cosas y subí corriendo las escaleras, pero en vez de ir a la pieza de mi primo (que no se encontraba porque estaba trabajando) me dirigí a la pieza de al lado. Ahí estaba la romi ordenando algo en su ropero. Golpee la puerta y entre. Le dije “por fin solos” y acto seguido le partí la boca de un beso. No sé si será por las ganas que tenía de que eso pasara pero me pareció que el tiempo transcurría a otra velocidad. Por un instante me olvide de mis problemas, de que estaba en Córdoba en la casa de mi tía, de que la persona a la que estaba besando era mi prima... fue un momento mágico.



A partir de ese momento solamente esperaba la llegada de la noche y de lo que eso traería aparejado. Al mediodía ella me invitó a ir a almorzar a la casa de su abuela (la madre de su padre) Yo acepte gustoso, pensando que así tendría un poco más de libertad ya que tal vez podríamos salir a dar una vuelta por la ciudad. Eso fue así en solo en parte, ya que al llegar a la casa de su abuelita salió a nuestro encuentro su novio. El loco debe tener unos 19 o 20 años de edad (nunca me intereso demasiado saber de él) es alto y bastante flaco. Según mi tía es un vago que ya va repitiendo 3 veces 2 año polimodal. A pesar de todo el vago me cayó bastante bien, y no me molestó demasiado que nos acompañara a la romi y a mi a dar una vuelta por la ciudad. Fuimos a un shopping, de esos de ciudades importantes (no como el shopping Estación Recoleta, jaja) Era un local inmenso tardamos horas en recorrerlo, porque entramos a varios de los locales y nos tomamos unos helados.



Como a las 7 de la tarde volvimos a la casa de mi tía. Yo estaba muy cansado por el viaje y la caminata, así que me fui a mi pieza en donde me encontré con mi primo pancho (Francisco) que es el único hermano de Romina, cuando lo vi estaba armando su bolso porque esa misma noche se iba con unos amigos a San Carlos Mina, un pueblito ubicado a unos 250 km. de Córdoba, aprox. Yo le dije que era una lástima que se fuera porque yo había hecho el viaje para visitarlos a ambos y que lo iba a echar de menos (aunque eso no era del todo cierto porque mientras menos gente quedara en la casa mejor para mi...) A las 9 vino el padre a buscar a pancho y sus amigos para llevarlos hasta la terminal. Yo pensé que ahora estaba todo listo para que mi prima y yo la pasáramos de maravilla, pero estaba equivocado. Al rato de irse mi primo aparece Pablito (así me gusta llamarlo al novio de mi prima) y tuve que postergar mis planes hasta la noche...



Esa noche nos acostamos los dos cada uno en su cama y empezamos a charlar de todo un poco, yo la había tomado de la mano y se la acariciaba mientras hablábamos. Al cabo de un rato de charla me doy cuenta de que ella se había quedado demasiado callada, y para mi sorpresa descubro que se había dormido mientras le hablaba.



Un tanto resignado al rato yo también me dormí porque había tenido un día demasiado pesado y casi no había dormido durante el viaje. Como a las 4 de la madrugada me desperté sobresaltado porque estaba sintiendo un cosquilleo extraño en mi pierna. Grande fue la sorpresa cuando veo que quien lo estaba ocasionando era mi primita… Al momento la atraje hacia mi y comencé a besarla y acariciarla como loco, estaba siendo objeto de una excitación terrible y no tenía ganas de contenerme. El único problema era que mi tía dormía en el cuarto de al lado y siempre fue de tener sueño ligero, asi que tuvimos que extremar precauciones en cuanto al ruido ocasionado. Luego de un breve “precalentamiento” la romi me pregunto si tenía protección, a lo que yo respondí que si y fui a buscar los forros al bolso (verdaderamente tenía todo un arsenal en el bolso, había de todos los tamaños y colores, texturados, lubricados y superfinos… y yo quería probarlos todos, jeje)



Como yo no tenía la menor idea de cómo carajo ponerme un forro deje el asunto en sus manos... Una vez puesto ella se incorporó sobre mi y me ayudo con su mano a guiar mi pene dentro de su vagina. En un principio me costo agarrar el ritmo, pero a los 5 min. ya le había tomado la mano y estábamos gozando como locos. Estuvimos haciéndolo un rato en esa posición hasta que ella se cansó y me pidió que lo hiciera en la forma convencional, o sea en la posición misionera. Debo decir que en esa posición me costo mucho mantener el ritmo, ya que debido a mi inexperiencia total cada dos por tres calculaba mal y se me salía afuera, aunque al rato ya le había tomado la mano (como dice el dicho: la práctica hace al maestro)



Esto duro apenas unos minutos, porque oímos un ruido que vino de la pieza de mi tía y mi prima (todavía no se como) pegó un salto de mi cama a la suya y yo me hice el dormido (boca abajo, para disimular) Era mi tía que se había levantado para ir al baño… prendió la luz y le preguntó a mi prima si estaba todo bien, a lo que ella respondió que si, que había prendido la radio un rato porque tenía insomnio (yo estaba rogando que mi tía se crea esa excusa porque sino estaba en el horno) Ella le dijo que no ponga muy alto el volumen porque me podía despertar a mi, paso al baño y después se fue a acostar de nuevo. Como se imaginaran, aunque ganas había no pudimos terminar lo que habíamos empezado y me tuve que quedar con las ganas y con mi medio debut…



Al otro día me levante cerca del mediodía, y no paso nada destacable hasta la noche, cuando decidimos ver unos dvd´s y tuve la mala suerte de que el novio de mi prima se acopló a último momento aguando mis planes.



Al otro día resolví no depender de nuevo de la suerte, porque ya me quedaba poco tiempo (me volvía el lunes a la mañana y las cosas no avanzaban) asi que le pedí permiso a mi tía para ir con Romina a Carlos Paz a pasar la tarde. Ella accedió, asi que después del almuerzo tuve a mi primita a mi disposición hasta la noche…



Decidimos hacer un mini tour por la ciudad, para poder armar una coartada convincente de lo que habíamos echo. Luego de una vuelta por el centro de la ciudad y después de haberme gastado algunos pesos en videojuegos y de haber ganado en el tejo rotundamente creímos que era hora de buscar algún lugar en donde poder intimar sin preocupaciones. Ahí surgió otro problema, ya que ninguno de los dos conocía un hotel alojamiento y era medio jodido andar preguntando por uno. Decidí jugarme (no iba a perder más tiempo ni oportunidades por pasar un poco de vergüenza) y le pregunte a un par de policías que estaban charlando en una esquina. Ellos se excusaron y me dijeron que no tenían idea, pero a mi me pareció que me dijeron eso para no comprometerse, jaja. Entonces resolví preguntarle a una de las personas con más conocimientos de la zona, paramos un taxi y le pregunte sino conocía algún telo cercano. Él me dijo que sabía de varios, pero que no quedaban en la zona céntrica y que un viaje hasta allá me iba a costar unos $15. Con la billetera medio dolorida por la tarifa salimos rumbo a lo que prometía ser una tarde inolvidable!



Luego de 20 min. de viaje llegamos a el hotel alojamiento L´prive, un complejo muy lindo con más de 20 habitaciones, y un servicio de lujo (otro dolor para mi bolsillo) Hablamos con el encargado y nos dio la habitación 15. Esa habitación era un sueño, el lugar estaba muy bien ambientado, teníamos radio, luces de diferente intensidad, yacuzzi (pero creo que eso era un servicio aparte) y una hermosa cama de dos plazas a nuestra entera disposición.



La pasamos de maravilla, tuvimos dos horas de sexo que no voy a olvidar jamás ya que solo parábamos un rato cada vez que yo acababa, pero enseguida volvíamos a la acción (aunque tengo que destacar que pese a mi disconformidad lo hicimos tapados y en penumbras, ya que a mi primita le daba vergüenza que la vea desnuda…) Lo único malo de la salida fue el frío que agarramos a la salida del motel, ya que el taxi que habíamos pedido demoró más de una hora en pasar a buscarnos (varias llamadas de por medio) y estaba muy fresco en la ruta a esa hora.



Como me había gastado todo el dinero que tenía, tuvimos que hacer cola en un cajero para sacar más, por lo cual volvimos a la casa de mi tía pasadas las 22 hs. A pesar de los reclamos de mi tía y del novio de mi prima todo salió muy bien, ya que habíamos practicado una coartada detallada de todo lo que hicimos en Villa Carlos Paz y por suerte se la creyeron.



Esa noche casi no dormí y al día siguiente a las 7 de la mañana me despedí de mi tía, mi prima y del pequeño bambi…



Con mi prima nos seguimos escribiendo, aunque con menos frecuencia que antes. Hace unas semanas dejó al novio anterior, pero en poco tiempo consiguió otro. Ella me pidió que repitiéramos el encuentro, pero yo no quiero saber más nada ya que el ex novio se enteró y casi se me pudre todo…







Hasta la próxima.







aLex